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Cuidados de las flores preservadas.

Las flores preservadas son flores naturales cuya transformación se realiza mediante un proceso de rehidratación con glicerina y otros compuestos vegetales; de ello se obtiene una flor que perdura su aspecto manteniendo la flexibilidad de la flor fresca, consiguiendo que no se fracture fácilmente. Algunas también pueden ser sometidas a procesos de coloración. Comúnmente son confundidas con las flores secas, aunque en apariencia pueda despistarnos no tienen nada que ver; hay dos características que la diferencian: la primera es que algunas como el eucalipto y la lavanda mantienen su olor original, al contrario que la flor seca claro. Y la segunda es que mientras que la seca pierde textura durante el proceso de secado, la preservada lo mantiene.

Proceso de preservación.

Se recolectan las flores cultivadas en su momento óptimo.

  • Recolectadas, se introducen los tallos en el líquido preservante
  • La flor absorbe por el tallo el líquido, hasta que la savia queda sustituida por el preservante.
  • Completado el proceso, se somete cada flor a un control de selección para eliminar las defectuosas y se eliminan las hojas y pétalos dañados o que se encuentren secos.
  • Una vez finalizado, la flor está lista para que la disfrutes durante mucho tiempo.
  • Existen otros procesos de preservación como por ejemplo inmersión o pulverización, dependerá del tipo de planta se utilizará uno u otro. A continuación, te contamos sus ventajas y más abajo los mejores cuidados para que mantengas en perfecto estado tus flores preservadas.

A continuación, te contamos sus ventajas y más abajo los mejores cuidados para que mantengas en perfecto estado tus flores preservadas.

Ventajas de las flores preservadas.

Te contamos a continuación las ventajas son su durabilidad, se conservan en buen estado y si se cuidan adecuadamente mantener su belleza. Necesitan pocos cuidados como limpieza de vez en cuando y evitar el sol directo, más abajo te contamos los mejores consejos para cuidar a la perfección tus flores preservadas. Otra ventaja es su capacidad decorativa gracias a los procesos de coloración. Si estás buscando desventajas, tan sólo te contamos dos y no lo son tanto, es cierto que no todas las flores y plantas verdes se pueden modificar para ser preservada; y su aumento de precio dado el proceso que sufre, pero si comparas con las flores frescas su durabilidad con la propia de las flores preservadas, merece mucho la pena puesto que resultan más económicas dado que pueden durar varios años.

Consejos de flores preservadas.

Tal y como te hemos contado no requiere de un gran cuidado, sólo de una gran admiración y momentos de disfrute jugando a todas las posibilidades de decoración que ofrecen las flores preservadas.

  1. Evitar la luz del sol: a diferencia de las plantas de exterior y de interior, a las flores liofilizadas y preservadas, no les sienta bien el sol; si queremos alargar la vida de nuestras flores preservadas debemos recordar que su tejido vegetal ha sido rellenado con glicerina por lo que el sol directo puede ser incluso perjudicial dado que la incidencia de los rayos sobre la propia flor puede acelerar el proceso de secado del líquido de glicerina que permite su conservación y además, el sol directo puede modificar la tintada de nuestra plantas, ya que el sol en general afecta a los colores de todo lo que se exponga a él en exceso.
  2. Ambiente seco: la humedad puede pudrir nuestras flores preservadas, por lo que se deberá buscar un lugar lo más seco posible, de la misma forma que no es recomendable situarlas en zonas con grandes corrientes de aire, ni de fuentes de calor como puede ser un foco de luz directo o radiadores si estamos hablando de épocas con bajas temperaturas.
  3. Limpia con cuidado: no utilizar productos abrasivos, tan sólo con un plumero o un paño suave para limpiar el polvo. Aunque este tipo de flores no necesitan hacer la fotosíntesis, el polvo puede dañar la estructura de pétalos y hojas.
  4. No aplastar la flor: al no contar con savia, las flores preservadas no mantienen la elasticidad de las naturales. Por ello hay que tener cuidado con aplastar los pétalos dado que se puede provocar su rotura.
  5. Fuera el agua: no es buena idea meter en agua dado que no son flores frescas, tal y como te hemos dicho, la humedad puede pudrirlas, por lo que imagina qué le puede pasar si las metes directamente en agua.

Si eres nueva en este mundo floral, te recomendamos este artículo de La Vanguardia sobre flores preservadas y si te ha quedado alguna duda sobre el cuidado de las flores preservadas, no dudes en contactar con nosotras, desde Kihana Flores Preservadas te ofrecemos el mejor asesoramiento y catálogo con el que deleitar tus grandes momentos.

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