Limpieza de las flores preservadas.

Te preguntarás porqué te hablamos de la limpieza en una web de decoración floral, todo tiene su relación, así que toma tu bebida favorita, silencia el teléfono, y disfruta de este post en el que te hablamos de la importancia que tiene cómo limpiar las flores preservadas. Según la psiquiatra Dra. Swati Mittal, entrevistada en la revista AD (especializada en decoración, arquitectura y arte) sobre la psicología tras la limpieza, ‘’limpiar una casa quema calorías y también es bueno para nuestro cuerpo porque libera endorfinas o sustancias químicas que nos hacen sentir bien dentro del cerebro […] reduce la ansiedad y tiene un efecto positivo en nuestra salud mental’’.

Tranquila, no se nos ha ido la cabeza del tiesto, queremos compartir que la limpieza, dentro de que la mayoría de veces no nos apetezca hacerla, tiene tanto valor sanitario como mental, y en esa limpieza entra la decoración, de nada sirve una limpieza mal hecha.

El porqué de las flores preservadas.

Desde Kihana, queremos invitarte a que abraces el concepto de que las flores preservadas no son únicamente decoración, en la psicología que hay tras la limpieza, también se trata la armonía de una decoración coherente y equilibrada, no sólo una estantería limpia nos da bienestar, si la decoramos con nuestros libros favoritos, y una planta, visualmente nos permitirá estar más receptivos al bienestar y será nuestra pequeña vía de escape en esos momentos tensos del día a día.

Por ello apostamos por las flores preservadas, su tratamiento ofrece continuidad en el tiempo de forma prolongada entre tres y cinco años, según el tipo de flor, por lo que visualmente no se marchita y su fragancia ayuda a la armonía de nuestro bienestar en casa, donde huimos para desconectar tras un tedioso día.

Cómo limpiar las flores preservadas.

De la misma forma que cuidando nuestros bienes más preciados, ese juguete con el que disfrutabas de niña, o esa foto que recuerda tu último gran viaje, para que duren en el tiempo; si cuidas tus flores preservadas, preservarás su esencia en el tiempo, al menos, mantendrás la alta calidad de sus propiedades.

No es un cuidado que implique una gran dedicación, o gran dificultad. Como te hemos dicho, su duración estimada es de entre tres y cinco años, si las cuidamos podremos disfrutar más tiempo de ellas, pero al fin y al cabo, no son eternas e irán perdiendo textura y color. Para su cuidado hay que tener en cuentas unos aspectos básicos.

1. Incidencia de la luz solar: el tejido vegetal de estas flores se rellena de glicerina, por lo que es perjudicial dejarlas en un lugar donde el sol dé directamente dado que acelera el secado de la glicerina que es con lo que se conserva. Pueden vestir muy bien una sala con luz natural, pero ten en cuenta no ponerlas pegadas a la ventana. Evitar la humedad: ya que esta puede hacer que se pudra, por lo que es recomendable buscar un lugar lo más seco posible, y sin corrientes de aire; en caso de que, por las condiciones climáticas, recuerda que la Bestia le dio a Bella una rosa en una urna de cristal, es una opción de tantas que ofrecen las flores preservadas. No poner en agua: al igual que la humedad, puede llegar a pudrir la flor.

Limpieza preservada.

Para limpiar las flores preservadas, es bien sencillo, tan sólo debes pasar un plumero o un paño suave sobre las flores para limpiar el polvo que se deposita, no solo por estética ni higiene, sino porque puede estropear la estructura de pétalos y hojas.

De hecho, tampoco es recomendable, si queremos que se mantengan, es no aplastar los pétalos ni las flores, al haber sido tratadas, no cuentan con la elasticidad propia de las flores naturales y puede provocar su rotura.

Así que contacta con nosotros, en Kihana sabemos qué flores preservadas son la mejor opción para decorar tu casa y ayudarte a encontrar ese bienestar que todas necesitamos al final del día.