Rosas para hablar de amor

Debido a su simbología, las rosas han sido testigos de muchas historias de amor, en su gran mayoría rosas rojas. Las rosas rojas llevan implícito el sello de la pasión y el enamoramiento pero también pueden representar un gran afecto, por lo que no debemos dudar si queremos regalarlas en otra ocasión y a otras personas que no sean nuestro Romeo o nuestra Julieta.

Hablando de enamoramientos, pasiones y de Romeo y Julieta , sin duda tenemos que hablar de Shakespeare In Love. Para unos, una gran historia de amor. Para otros una historia de lujuria y egoísmo. 

Quizás tú encuentres un poco de ambos, como encontré yo. Shakespeare, habiendo perdido todas las esperanzas y desesperado por encontrar su musa, finalmente encuentra en Viola la inspiración. Inspiración que desata pasiones y que le permite plasmar la historia de Romeo y Julieta. Para algunos triste y para otros sublime.

Así son las historias de amor, sentimientos desenfrenados, sin cordura, sin sosiego. Sentimientos para los que siempre habrá una rosa que pueda contar la historia. 

Para contar esa historia nace Kihanita In Love, con sus rosas rojas y pasionales por excelencia, acompañadas por la pureza de las Paniculatas y su Helecho central representando el más intenso de los encuentros. Kihanita In Love es una oda al amor y a la pasión envuelta en la frase de Viola Lesseps, “Tendré poesía en mi vida, y aventura, y amor”

Posdata

Te quiero. ¿Te suena esta frase? Hay tantas historias que contar, que nos faltarían lienzos. Con Posdata: Te quiero nos adentramos en el amor para toda la vida y ¿qué es el amor para toda la vida?¿cómo se reconoce? ¿Hay una rosa o alguna flor exótica que lo represente? 

Lo cierto es que el amor es como las flores, único en cada una de sus formas y lo que para unos es la certeza de la eternidad, para otros es un camino de la mano sin principio ni final. Así de misterioso es el amor.

Nos regala una lección de vida que nos invita a reflexionar sobre ¿qué es un para siempre? Con un Te quiero lo hemos dejado plasmado. Con Hortensias granates envueltas en Eucaliptos y Helechos, acompañadas de flores de arroz.

Precioso donde los haya y cargado de sentimiento.

¿Qué cuenta tu corazón?

Eso es lo que significa Sunao. El comportamiento sincero y desinhibido cuando seguimos los dictados del corazón y no lo que se espera de nosotros. Que distinto sería el amor si siempre siguiéramos sus dictados y dejáramos a un lado los convencionalismos.

Las ideologías, las religiones, las razas. Si simplemente le dejáramos hablar libremente, con su lenguaje universal. Como el Lenguaje de las flores.

Así surge Sunao, auténtico, erguido y exuberante, con siete historias que contarte, con siete variedades de hermosas flores preservadas, a cuál más bella.

Para ellas

Leonor, Clara y María representan a todas las madres, a todas las hermanas, a todas las amigas. A todas esas mujeres que han sido parte de nuestra historia y las que lo siguen siendo.

Representan los diferentes tipos de amor para que no olvides que para todos hay una flor, que para todos hay un te quiero especial. Esos Te quieros que no debemos dejar para mañana. Esa llamada, ese gesto, ese abrazo, aunque sea en la distancia.

Leonor, Clara y María son ramos de flores recolectadas en su momento de mayor belleza. Desde KiHana hemos querido entregarte esa belleza preservada para que no olvides que lo bello también es duradero.

Más que rosas

Más allá de las rosas, la historia de regalar flores en el día de San Valentín, no solo entre los enamorados sino entre los seres queridos, surge de la antigua costumbre de expresar los sentimientos por medio de las flores. De la creencia, y no menos cierta, de que cada flor transmitía un mensaje diferente dependiendo de quien la entregara y a quien fuera dirigida.

Era, en el siglo XVIII la mayor expresión de lenguaje no verbal de la historia. Ese lenguaje no verbal que creíamos conocer desde no hace mucho tiempo. Fue Carlos II de Suecia quien regalaba flores para transmitir mensajes que solo podía expresar por medio de ellas.

Entre sus alas

No pensamos en San Valentín y en amores sin acordarnos de Cupido, hijo de Venus, diosa del amor y la belleza. Ese Querubín travieso repartiendo flechazos de amor tanto a Dioses como a humanos.

Cuenta la historia que para cada ser o deidad hay una flecha destinada y que antes o después viene acompañada de una hermosa flor..

Presta atención al Lenguaje de las Flores y a quien las entrega, puede que en esas manos esté oculta la señal del Querubín. 

¡Hasta pronto!