Soy Ana Alcázar; Kihana. Me encanta la decoración floral y en especial las flores preservadas.
El día que descubrí las flores preservadas decidí centrarme en ellas de forma profesional. Lo dejé todo por este mundo tan apasionante de la decoración floral en general y las flores preservadas en particular. Trabajo por encargo porque, aunque las flores preservadas pueden durar hasta años, no dejan de ser naturales (por muy tratadas que estén) y la naturaleza es delicada. Me gusta que los ramos, centros o decoraciones que me pedís, os lleguen perfectas, recién hechas para que no tengan ni una motita de polvo.
En KiHana además de flores y follajes también trabajamos con musgo y con árboles preservados, y unos bonsáis preservados que te encantarán. Nuestras decoraciones no tienen límite. Colaboramos con arquitectos e interioristas para conseguir ese toque tan especial y personal que define tu hogar o tu empresa.
En nuestro equipo contamos con profesionales como nuestra compañera Ana. la cual me ayuda en la elaboración de centros, ramos, ramilletes, muros florares y demás creaciones. Una persona entusiasta, con gran gusto y capacidades artísticas. No es sólo una compañera sino una gran profesional y una amiga, parte de la familia de Kihana Flores preservadas.
Creación y originalidad
Desde el momento en el que empiezo a crear se conjugan en mi mente aromas, colores y sensaciones. Cuando hablo de “crear”, todavía no tengo las plantas en mis manos, están en mi mente, conjugando esos colores y aromas para una persona en especial y un rincón de su estancia único.
Cuando alguien llega hasta mí y me cuenta qué quiere y en qué lugar lo quiere, casi sin saberlo, me está permitiendo conectar con sus emociones.
Cuando piensas en flores preservadas piensas en parar el tiempo, en que en lugar de días te acompañen por meses o años y, precisamente por eso, la elección es importante y personal.
Nuestras creaciones
Así lucen nuestras creaciones con plantas y flores preservadas. Listas para decorar tus rincones.
Y ¿a qué huele Ki Hana?
Soy una enamorada de la cultura japonesa. Ki es árbol y Hana además de Ana es flor en japonés.
Ki Hana huele a Sakura (flor del cerezo), que significa belleza de corazón. Huele a Tsubaki (Camelia), que significa amor perfecto, humildad y discreción. Pero sobre todo huele a Sakurasou (Prímula), que significa amor duradero.
Amor que te entrego con cada una de mis creaciones. Gracias a todos los que de alguna forma dejan su aroma al pasar por Ki Hana.